Tiene lugar el acto central por el 20º aniversario del deceso de KIM IL SUNG
Tuvo lugar solemnemente hoy en el Palacio de Deportes de Pyongyang el acto central de recordación por el 20º aniversario del fallecimiento del Presidente Kim Il Sung.
Asistió a la ocasión el Mariscal Kim Jong Un, Primer Secretario del Partido del Trabajo de Corea, Primer Presidente del Comité de Defensa Nacional de la República Popular Democrática de Corea y Comandante Supremo del Ejército Popular de Corea.
Participaron Kim Yong Nam, Pak Pong Ju, Hwang Pyong So y otros cuadros directivos del partido, el Estado y el ejército, el presidente de partido amigo, los funcionarios de los organismos del partido, las fuerzas armadas y el poder, entidades sociales, ministerios y órganos centrales, oficiales y soldados del Ejército Popular de Corea y del Ejército de Seguridad Interior del Pueblo de Corea, funcionarios de las instituciones de ciencia, educación, literatura y arte, salud pública, prensa e información, familiares de mártires revolucionarios y trabajadores capitalinos.
También estuvieron presentes los compatriotas en ultramar y sus delegaciones, las personas relacionadas con el Presidente, el representante de la sucursal del Frente Democrático Nacional Antiimperialista en Pyongyang, los representantes diplomáticos y de organizaciones internacionales y los miembros del Cuerpo de Agregados Militares, acreditados en Corea, y otros huéspedes extranjeros.
Todos los participantes guardaron un momento de silencio en memoria del Presidente.
La palabra de la ocasión estuvo a cargo de Kim Yong Nam, miembro del Presidium del Buró Político del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea y presidente del Presidium de la Asamblea Popular Suprema de la RPDC.
Toda la vida del Presidente Kim Il Sung fue la del más destacado líder del pueblo y gran hombre sin igual que dedicó todo lo suyo por la patria, el pueblo, la época y la humanidad, comenzó el orador y prosiguió:
Ya en el primer período de su lucha revolucionaria, el Presidente concibió la idea Juche centrada en las masas populares tras aclarar el principio de que la independencia significa la vida de las masas populares, los países y naciones.
En toda la trayectoria de su dirección sobre la revolución, resolvió todos los problemas al estilo coreano y conforme a los intereses del pueblo y a las condiciones reales del país.
En la ensangrentada guerra revolucionaria antijaponesa, cumplió el deseo nacional de liberación de la patria tras derrotar al bárbaro imperialismo japonés y en la Guerra de Liberación de la Patria, logró la victoria histórica rompiendo con su genial idea, estrategia y táctica militares el mito de «supremacía» del imperialismo norteamericano.
Con el magno proyecto de construir una patria próspera, cumplió con éxito la revolución social de dos etapas superando con su voluntad indoblegable las pruebas surgidas en medio de la lucha por construir el Estado y hacer la reconstrucción posbélica.
Mediante el gran auge de Chollima, llevó a cabo la industrialización socialista y sentó la firme base de la economía nacional autárquica.
Durante largo tiempo desde que emprendió el camino de la revolución, dedicó todo lo suyo por la victoria de la revolución pensando únicamente en la patria y el pueblo y venciendo todas las penas y dolores que podía probar un hombre y un revolucionario.
Con su gran magnanimidad, el Presidente Kim Il Sung, padre de la nación, acogió en su regazo a todos los que amaban el país y la nación.
El Sol de toda la humanidad es respetado e idolatrado por los líderes del partido, jefes de Estado y personalidades de numerosos países del mundo y hasta por los hombres con pensamientos y criterios políticos diferentes.
Al cumplir con éxito la autóctona causa de construcción del partido, el Estado y el ejército, preparó la sólida base político-militar para la continuación y la culminación de la revolución del Juche.
Practicando la política abarcadora y la de beneficios populares, transformó todo el país en una gran familia y logró la unidad monolítica.
Levantó nuestro socialismo centrado en las masas populares y preparó una base de eterna duración por la prosperidad de toda la nación.
Resolvió perfectamente el problema de sucesor de la revolución, cuestión clave en la continuación de la causa revolucionaria, y prestó mucha atención a las labores para desarrollar con pureza las tradiciones revolucionarias y formar a las nuevas generaciones como continuadoras de la revolución.
Al presentar las Tres Cartas para la Reunificación de la Patria, iluminó el camino a seguir para realizar la aspiración nacional a la reunificación y dejó su última firma en un documento histórico referente a esta empresa nacional. De esta manera, dedicó toda su vida por la reintegración territorial del país.
Con sus enérgicas actividades exteriores elevó extraordinariamente la posición internacional y el prestigio de la RPDC y realizó grandes proezas por el desarrollo del movimiento socialista y la victoria de la causa de la independencia antiimperialista.
Se transmitirán generación tras generación las nobles hazañas del Presidente quien con profundas ideologías y teorías, extraordinaria capacidad directiva y magnas prácticas revolucionarias abrió el maravilloso futuro de la Corea del Juche.
Gracias a las imborrables proezas del Presidente, el ejército y pueblo coreanos superaron la marcha penosa no vista en la historia, abrieron la nueva era de construcción de un Estado próspero socialista y exaltaron a todo el mundo la dignidad y el poderío de la Corea del Songun bajo la guía del Dirigente Kim Jong Il.
La causa revolucionaria del Juche, iniciada y conducida victoriosamente por los Generalísimos Kim Il Sung y Kim Jong Il, se lleva adelante por el Partido del Trabajo de Corea.
Gracias a la dirección del gran partido, se realizarán con brillantez todos los proyectos y deseo de toda la vida del Presidente y prosperarán generación tras generación la gran nación de Kim Il Sung y Corea de Kim Jong Il.
El mismo día, se realizaron los actos similares en todas las provincias, ciudades (municipios), distritos y complejos.
KCNA