Portavoz del Gobierno: La RPDC responderá con intransigencia a la «resolución de sanción» de la ONU

El portavoz del gobierno de la República Popular Democrática de Corea (RPDC) hizo pública el día 4 la siguiente declaración:

    Estados Unidos y otras potencias y sus seguidores, pasmados ante la prueba de bomba de hidrógeno y el exitoso lanzamiento del satélite de observación de la Tierra Kwangmyongsong-4 de la RPDC, fabricaron a la madrugada del 3 de marzo la «resolución de sanción» anti-RPDC no. 2270 abusando del nombre del Consejo de Seguridad de la ONU.

    Tan pronto como se aprobara la «resolución», el mandatario estadounidense Obama publicó un «mensaje de bienvenida», e hizo al secretario de Estado Kerry presentar la «declaración de apoyo». Y otros fulanos y menganos también están acorde con ellos.

    Hablando de la eficacia de la «resolución de sanción» del Consejo de Seguridad de la ONU», EE.UU. anunció hasta la «sanción por separado» fijando a los funcionarios medulares de nuestro ejército y gobierno como objetos de «sanción especial».

    También, Japón emitió un «comentario de apoyo» de Abe y la «declaración de apoyo» del canciller Kishida.

    Hasta la banda surcoreana de Park Geun-hye transmitió en la noche avanzada la llamada «declaración» abogando por la «sanción más fuerte y comprensiva» y «mensaje rotundo».

    No es asombrosa ni novedosa la presente «resolución de sanción» fabricada al cabo de discusión de 57 días por EE.UU. y otras potencias y sus seguidores, aturdidos ante la prueba de bomba de hidrógeno y el lanzamiento exitoso del satélite Kwangmyongsong-4 que estremecieron el mundo en el umbral del año nuevo. Ya lo hemos previsto.

    Lo problemático es que la presente «resolución de sanción» es el crimen internacional más abierto y más cruel tendente a aislar y aplastar la RPDC, Estado soberano independiente y justo, bajo los injustos pretextos.

    Ya hemos aclarado que la prueba de bomba de hidrógeno de la RPDC es una medida de aseguramiento del disuasivo nuclear para defender la soberanía del país y el derecho a la subsistencia de la nación frente a la política norteamericana de hostilidad y su creciente amenaza nuclear, y también deviene el ejercicio del derecho legítimo de un Estado soberano reconocido en virtud de la ley internacional.

    Con respecto a que EE.UU. y otras potencias y sus satélites fabricaron la «resolución de sanción» del Consejo de Seguridad de la ONU, documento que amenaza gravemente la soberanía de la RPDC y desafía frontalmente a nuestra justa causa, el gobierno de la RPDC aclara a todo el mundo la siguiente posición:

    Primero, rechazamos fuertemente la «resolución de sanción» del Consejo de Seguridad de la ONU calificándola de provocación más cruel contra la RPDC, prestigioso Estado soberano e independiente.

    La presente «resolución de sanción» anti-RPDC es un documento criminal aprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU violando brutalmente la justicia internacional y la imparcialidad actuando al son que le tocan EE.UU. y otras potencias y sus satélites perdiendo su misión de asegurar la paz y la seguridad del mundo.

    Desde el principio, no hemos reconocido ni una vez todas las «resoluciones de sanción» anti-RPDC de la ONU.

    Segundo, tomaremos de continuo las contramedidas rotundas ya que Estados Unidos y otras potencias y sus seguidores optaron el camino de pisotear abiertamente nuestra soberanía y nuestro derecho a subsistencia.

    En nuestro enfrentamiento se movilizarán varios medios y métodos inclusive la poderosa y despiadada contramedida física.

    No estaremos jamás con brazos cruzados ante la realidad en que se ven violados la soberanía y el derecho a subsistencia del país.

    Si se produce un incidente inesperado en la Península Coreana y sus contornos, EE.UU. y otras potencias, las fuerzas seguidoras y los que están involucrados en la presente «resolución» de la ONU se responsabilizarán totalmente de su consecuencia.

    Tercero, con motivo del presente archi-crimen internacional cometido esta vez por el Consejo de Seguridad de la ONU, avivaremos más las llamaradas de la lucha en escala mundial para quebrantar decididamente el injusto y desigual orden político internacional.

    No podemos estar por más tiempo con brazos cruzados ante la corriente mundial en que se violan la justicia y la imparcialidad y reinan la pauta de doble rasero y la injusticia.

    Es la posición de la RPDC el que ésta no puede tolerar jamás la realidad en que se niegan a su antojo la legalidad y la ilegalidad según la pauta de Estados Unidos y otras potencias y se pisotean flagrantemente la justicia y la veracidad.

    Quien diga lo que quiera, la RPDC intensificará más en el futuro también el disuasivo nuclear autodefensivo al tomar firmemente la bandera de línea de desarrollo paralelo y avanzará con valentía por el camino optado ya hacia la cima de la potencia de satélite.

    El mundo verá correctamente cómo la RPDC, que se enfrenta rotundamente a la «resolución de sanción» de la ONU, acaba con la historia criminal de la ONU caída en la escena de arbitrariedad de EE.UU. y otras potencias y los imbéciles que les siguen a ciegas y cómo establece la justicia y la imparcialidad internacionales.

Pyongyang, 4 de Marzo de 주체105 (2016)

 

KCNA

Descubre más desde KFA Euskal Herria

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo