El Ministerio Relaciones Exteriores de la RPDC revela carácter reaccionario y peligroso de la visita de Obama a Asia
En relación con que el presidente norteamericano Obama va a visitar pronto la región asiática, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular Democrática de Corea publicó el día 21 la siguiente declaración:
La presente visita de Obama siendo un eslabón de la ejecución de la estrategia de Estados Unidos de dar importancia a la región de Asia-Pacífico deviene un giro reaccionario y peligroso que promueve más la confrontación y la carrera armamentista nuclear en esta región muy inestable.
Esta estrategia trazada a finales de 2011 por la administración de Obama so pretexto de «reequilibrar» dicha región, consiste, en su esencia, en cercar y controlar con la fuerza a sus rivales de la región y seguir manteniendo su supremacía política y militar.
Estados Unidos toma como pretexto la «amenaza de armas nucleares y misiles» y la «provocación» de la RPDC para ocultar la esencia hegemónica de su estrategia y evitar la resistencia de las potencias del continente euroasiático.
En el informe del «examen de la cuatrienal defensa nacional» publicado a principios de marzo por el Departamento de Defensa de EE.UU. reconfirmó que conforme a la «estrategia de reequilibrio» desplegará hasta 2020 el 60% de las fuerzas marítimas en la región de Asia-Pacífico y el secretario de Defensa norteamericano, durante su gira por los países vecinos de la RPDC, anunció que su país ubicará de nuevo 2 buques Aegis en Japón hasta 2017, todo bajo pretexto de la «provocación», la «amenaza» y «agresión» de la RPDC.
Bajo la cobertura de la aceleración del desarrollo nuclear y la posibilidad de la «provocación» de la RPDC, el secretario de Estado de EE.UU., durante su visita al Sur de Corea y China a mediados de febrero, dijo que en adelante también realizará los ejercicios conjuntos militares con el Sur de Corea en el mismo período y con el mismo modo, sin hacer caso de la propuesta importante del Comité de Defensa Nacional de la RPDC y la realización del contacto de alto nivel Norte-Sur de Corea.
Está muy claro que esta vez Obama también acusaría como de costumbre a la RPDC.
EE.UU. realiza sin cesar los ejercicios conjuntos militares, más ofensivos y agresivos, sólo en la Península Coreana entre varias regiones de Asia-Pacifico y mantiene premeditadamente la circulación viciosa de la agravación de la situación aumentando de continuo su frecuencia y dimensión con el objetivo de incitar a la RPDC para que fortalezca el disuasivo nuclear y tome las contramedidas militares y de esta manera justificar sus maniobras militares poniendo a ésta la tilde de «belicosidad».
Sin embargo, EE.UU. se equivoca demasiado mucho.
El aumento de fuerzas armadas y los ejercicios conjuntos militares de EE.UU. en la región de Asia-Pacifico se enfrentan con la resistencia abierta sin precedente de los países regionales, en lugar de justificarse.
La RPDC no cederá ni un paso atrás ni desea una buena surte en resolver los problemas fundamentales relacionados con la seguridad del país y la nación temiendo la tilde de «belicosidad» impuesta por EE.UU.
La posición política de la RPDC es esforzarse por todos los medios por consolidar el justo disuasivo autodefensivo capaz de enfrentarse tajantemente a EE.UU. mientras este imperio siga hostilizándola.
Cuando EE.UU. al perseguir como ahora la supremacía de la región de Asia-Pacifico sigue tratando de perjudicar el interés estatal de la RPDC, al fin le caerá la consecuencia no buena.
Las maquinaciones de EE.UU. surtirán el efecto muy negativo, en la etapa inmediata en la perspectiva de la reanudación de las conversaciones a 6 bandas y la desnuclearización de la Península Coreana y a la larga, promoverán sin falta la carrera armamentista nuclear en esta región.
La carrera armamentista nuclear del Nordeste Asiático que acarreará la consecuencia más destructiva que el problema nuclear del Oriente Medio llevará al fracaso completo el mismo proyecto sobre la construcción del «mundo sin armas nucleares» ideado por Obama.
Sería mejor que la administración de Obama calcule serenamente si la política hostil anti-RPDC convenga efectivamente a su interés final, cuando le queda tiempo todavía.
KCNA