Clausura del 8º Congreso del Partido del Trabajo de Corea (amplia información, vídeo y fotos)
Conquistemos una nueva victoria del socialismo coreano con ideales de «Iminwichon» (considerar al pueblo como el cielo), «unidad monolítica» y «autoconfianza»
En medio del fuerte apoyo y expectativas de todos los militantes del Partido, los habitantes y los oficiales y soldados del Ejército Popular, quedó clausurado el día 12 de enero el VIII Congreso del Partido del Trabajo de Corea tras terminar con éxito el debate sobre los puntos de la agenda.
La reunión de la octava jornada del cónclave transcurrió en un ambiente signado de la voluntad revolucionaria de los delegados de apoyar con fidelidad la idea y dirección del Comité Central del Partido, dedicarse a la materialización de la resolución de la magna cita y servir incondicionalmente al pueblo.
Salió a la tribuna el Secretario General del PTC, Kim Jong Un, quien con su extraordinaria perspicacia ideo-teórica y probado liderazgo, marcó un hito de nueva victoria para el avance del Partido y la revolución y coronó el Congreso del Partido como el revolucionario de avance e innovación.
Todos los delegados le acogieron con estruendosas vivas.
El Secretario General pronunció el programático discurso resumen sobre el VIII Congreso del Partido
Este encuentro efectuado por octava vez en la historia de nuestro Partido puso sobre el tapete el programa de lucha inminente para abrir el período de nuevo auge y cambio brusco en la revolución y la construcción y los importantes problemas que se presentan en fortalecer y afianzar el Partido, y los deliberó acaloradamente.
En el informe, las intervenciones y las reuniones consultivas por sectores fueron criticados con seriedad y minuciosidad las tendencias y defectos que existen en las labores del Partido, Estado y ejército y otras ramas de la vida social y expresadas las decisiones y voluntad solemnes para superarlos.
A través de la deliberación sobre el primer punto de la agenda, fue aclarado qué y cómo debemos hacer nuestro Partido, Estado y pueblo en adelante, y esclarecidos los remedios de lucha para conquistar nuevo triunfo de nuestra revolución.
A diferencia de otros congresos del pasado, en el presente nuestro Partido analizó y examinó con franqueza sus labores no en facetas positivas, sino desde el punto de vista de crítica y esto tiene gran significado no menos que los éxitos alcanzados durante el lustro pasado.
Al rectificar el Estatuto del Partido del Trabajo de Corea reflejando con exactitud el principio de la construcción y labores del Partido y la demanda del desarrollo de la realidad, se han consolidado la capacidad de mando y la combatividad del Partido y preparado el importante cimiento para lograr su desarrollo sano.
Lo que el congreso formó al 8° Comité Central con los compañeros fieles al Partido y la revolución que poseen alta capacidad práctica y estableció el nuevo sistema de revisión de disciplina, sirve de radical punto de viraje en hacer que nuestro Partido cumpla con su misión y papel como poderoso Estado Mayor de la revolución.
Expresó que acepta como su máximo honor su reelección como máximo líder del prestigioso PTC por todos los delegados y militantes del Partido, pero se siente triste y cargado de responsabilidad al mismo tiempo. Y juró con solemnidad que consciente de la sagrada misión de representar y responsabilizarse del gran Partido Kimilsungista-Kimjongilista, hará todo lo posible por materializar el programa de lucha presentado por el Congreso del Partido y servirá fiel y abnegadamente a nuestro gran pueblo considerándolo como cielo de destino.
El 8° Comité Central del Partido electo por el apoyo y aprobación unánime de todos los delegados, manifestará su capacidad de dirección exacta y probada con el fin de obtener nuevos triunfos en la construcción del socialismo a nuestro estilo, en correspondencia a la alta esperanza y confianza de las organizaciones y militantes de todo el Partido y cumplirá con fidelidad el deber dado por la época. Para nuestro Partido y pueblo que hemos alcanzado el gran triunfo a que ningún otro hubiera atrevido en pésimas condiciones y vicisitudes, no puede existir el vendaval insuperable.
Acrecentar considerablemente la fuerza autóctona, la fuerza motriz interna de la construcción socialista y conquistar nuevas victorias en todos los sectores, esto es la idea y espíritu fundamentales del 8° Congreso del PTC.
El Secretario General Kim Jong Un afirmó que la importante tarea histórica que se presenta ante nuestra revolución exige a todo el Partido grabar una vez más en lo hondo del corazón el considerar al pueblo como el cielo, la unidad monolítica y la autoconfianza, e izar más alto estas banderas.
En Iminwichon está reflejada la inalterable demanda de nuestro Partido de mantener con firmeza el ambiente partidista revolucionario que toma como punto de partida de su construcción y actividades y como principio inmutable, el servir todo el Partido en bien del pueblo.
En la unidad monolítica y la autoconfianza están sintetizadas la concepción ideo-teórica sobre el linaje vital y la fuerza motriz de avance de nuestra revolución y la demanda política.
Luego apuntó que en los ideales de «Iminwichon», «la unidad monolítica» y «el apoyo en sus propias fuerzas» existen la llave fundamental para elevar la capacidad orientadora de nuestro Partido, el remedio clave para arraigarse entre las masas y la garantía fundamental para vivir únicamente y abrir el camino delantero.
Propongo no presentar en este cónclave alguna otra consigna lujosa, sino sustituirla con lema del 8° Congreso del Partido con grabar una vez más en el corazón estos 3 ideales sublimes de nuestro Partido.
A renglón seguido, afirmó que todo el Partido debe avanzar con valentía hacia el rumbo de avance histórico que indica el Congreso con la extraordinaria disposición, confianza y pasión de iniciar la nueva marcha.
Ante todo, debemos desplegar una contienda decisiva para cumplir sin falta el nuevo Plan Quinquenal para el Desarrollo de la Economía Nacional. Para superar las dificultades existentes, estabilizar y mejorar lo más pronto posible la vida del pueblo y preparar la firme garantía del progreso y enriquecimiento con nuestra fuerza, debemos solucionar con urgencia primero el problema de la economía.
Ante todo, debemos definir correctamente el rumbo del golpe decisivo en el frente económico y concentrar aquí la fuerza. La tarea medular del nuevo Plan Quinquenal para el Desarrollo de la Economía Nacional es tomar las industrias metalúrgica y química como eslabón clave del desarrollo económico, estrechar los lazos orgánicos entre las ramas de las industrias prioritarias, impulsar la vitalización real de la economía, mejorar la base material y técnica de la esfera agrícola, elevar el porcentaje de abastecer las materias primas con las domésticas en la industria ligera y elevar a una etapa más alta la vida de las masas.
En todas las ramas y unidades deben buscar la tarea y los remedios detallados para cumplir el nuevo Plan Quinquenal y ejecutarlos sin fallo. El éxito o el fracaso del nuevo plan dependen de cómo mejoran la administración económica.
Durante el período del nuevo Plan Quinquenal deben enfocar la atención partidista y estatal en restaurar y fortalecer el sistema y orden de planificar la economía bajo el mando y control unificados del Estado. En cuanto a los fenómenos que causan obstáculos a la dirección unitaria del Estado cacareando un tal carácter especial, aún después del Congreso del Partido, tienen que tomar fuerte medida de sanción, sin hacer caso qué unidad sea aquella.
El Máximo Dirigente recalcó que con el desarrollo realista de las ciencias y técnica han de garantizar con firmeza la construcción económica y la mejora de la vida del pueblo. En estas esferas deben fijar las tareas medulares y de estudio en cumplir el nuevo plan quinquenal y concentrar las fuerzas en ello.
Al incitar el desarrollo independiente y multifacético de las ciudades y distritos, tienen que desarrollar la industria local y preparar la base con que pueden mejorar el nivel de vida de las masas. En los organismos de dirección de la economía estatal deben tomar medidas privilegiadas para que las ciudades y distritos dispongan de suficientes cimientos económicos suyos y progresen de acuerdo con las características de sus localidades, y también asegurar la correcta guía y ayuda.
Durante el período del nuevo plan quinquenal también tenemos que prestar la atención estatal al desarrollo de la educación y la salud pública para que los pobladores sientan en las fibras de su ser los beneficios de la superioridad de los regímenes de la educación y salud pública socialistas, tanto en la capital como en las localidades. Han de priorizar la fuerte educación y disciplina a escala de todo el Partido, todo el Estado y todo el pueblo para oprimir y controlar con firmeza todos los fenómenos anormales antisocialistas y no socialistas, los actos delictivos como el abuso del poder, el burocratismo, la corrupción e ilicitudes, y las cargas fuera de impuestos.
Tienen que tomar como tarea importante el fortalecer más en lo cualitativo y cuantitativo la capacidad de defensa nacional. Deben hacer todo lo que esté a su alcance para fortalecer la disuasiva nuclear aun más y reforzar la superior potencialidad militar.
Para cumplir con éxito las tareas responsables e importantes que nos incumben, tenemos que fortalecer el Partido y elevar su función orientadora, ante todo, establecer el ordenado sistema de trabajo y el nuevo modo de trabajo en todo su seno, para que el nuestro sea la organización que trabaja y lucha, y la combativa.
Los directivos de la revolución tienen que cumplir su responsabilidad y deber a la cabeza de la columna en marcha. No deben olvidar ni un instante la esperanza del pueblo y redoblar el coraje para que puedan rememorar su jornada con conciencia y dignidad.
Todos los militantes del Partido deben cumplir su papel medular y vanguardista en la lucha por materializar las tareas trazadas por el Congreso del Partido. Siguiendo el espíritu y la idea de los antecesores que obtuvieron la gran victoria en la Guerra de la Liberación de la Patria con el indoblegable espíritu y la lucha heroica y terminaron en un corto tiempo la construcción postbélica apretándose el cinturón, tienen que desempeñar su papel importante en las obras más duras y difíciles.
El Máximo Dirigente Kim Jong Un dijo que es más pesado el deber de los miembros de dirección central del Partido, electos esta vez, y todos los delegados en materializar con éxito las metas y las tareas de la lucha sagrada propuestas por el presente Congreso.
Siguió que todos deben estar dispuestos a realizar una arremetida frontal más dura para conquistar la nueva victoria de la causa socialista y obtener resonante avance.
Continuó que es muy seguro nuestro triunfo mientras existen la ardiente fidelidad y la fuerza irresistible de la unidad de todos los militantes del Partido, demás sectores del pueblo y militares del ejército que apoyan el propósito y la decisión del Partido con su práctica.
El Mariscal Kim Jong Un exhortó a todos a luchar con más dinamismo para el logro brillante del programa de lucha que trazó el 8° Congreso del Partido, para el fortalecimiento y desarrollo del glorioso Partido del Trabajo y el avance victorioso de la causa revolucionaria del Juche y en bien del gran pueblo nuestro.
Cuando el Máximo Dirigente concluyó el discurso resumen, todos los participantes expresaron el apoyo total y aprobación con efusivas aclamaciones y aplausos.
El cónclave pasó al procedimiento para aprobar la resolución sobre el primer punto de la agenda «Balance de las Labores del Comité Central del PTC».
Examinó las opiniones creativas y constructivas, sintetizadas por el comité de elaboración del proyecto de la resolución a través de las reuniones consultivas por sectores, y decidió reflejarlas en la resolución del presente Congreso.
Los delegados reconocieron unánimemente que se han plasmado en la resolución las metas y tareas científicas, realistas y de movilización, convenientes a las demandas de la revolución en desarrollo.
El Congreso adoptó por unanimidad la resolución «Para cumplir cabalmente las tareas presentadas en el Informe de las Labores del VII Período del CC del PTC».
La resolución evaluó que el «Informe de las Labores del VII Período del CC del PTC» pronunciado en el VIII Congreso por el Secretario General Kim Jong Un balanceó correctamente las brillantes victorias y éxitos alcanzados por el Partido y pueblo coreanos en el período de revisión general e iluminó de modo científico el rumbo y los remedios de la lucha del próximo lustro por lograr el avance trascendental de la causa socialista por el estilo coreano.
Delineó nuevos objetivos de todos los sectores, inclusive la economía, la defensa nacional, la cultura y la administración estatal y social, y los innovadores remedios de cumplimiento para llevar la construcción socialista a la siguiente etapa de victoria basándose en los preciosos éxitos, experiencias y lecciones de la revolución coreana bajo la situación interna y externa creada.
El documento, estudiado y debatido profundamente por los delegados en las reuniones consultivas por sectores, sirve de máximo programa de implementación que ha asegurado suficientemente el carácter científico, práctico y de movilización y sintetizado la voluntad organizativa y la decisión de todo el partido.
Refirió que conforme al carácter del Congreso que trabaja, lucha y avanza, el presente conclave analizó y balanceó de manera global, tridimensional y anatómica los defectos y sus causas observados en la materialización de la resolución del VII Congreso del PTC durante el lustro pasado y debatió de manera profunda los remedios prácticos para superarlos.
Expuso la firme voluntad del VIII Congreso del PTC de lograr el avance trascendental en el fortalecimiento y desarrollo del Partido y la construcción socialista tras corregir y superar los errores intensificando la lucha de todo el partido.
Presentó las metas de la construcción socialista del próximo lustro que refleja la aspiración revolucionaria y decisión de todos los delegados y los militantes de todo el Partido de cumplir cabalmente las tareas combativas presentadas por el Secretario General en el Informe de las Labores del VII Período del CC del PTC.
La aprobación de la resolución constituye la determinación correcta de la hoja de ruta, que conduce al Estado y pueblo coreano a la senda del poderío y riqueza en el momento decisivo en que la gloriosa historia de los 75 años del PTC continúa hacia los 80, y una manifestación de la voluntad revolucionaria de millones de militantes de todo el Partido de lograr nuevas victorias del socialismo constatando de nuevo el ideal de Iminwichon (considerar al pueblo como el cielo), unidad monolítica y autoconfianza.
La resolución, aprobada por el VIII Congreso del Partido cuando los militantes y los habitantes de todo el país iniciaron llenos de confianza y optimismo la marcha del primer año de la década de 2020, funcionará como poderosa bandera combativa que estimula a grandes creaciones y cambios la histórica lucha de nueva epata por el desarrollo general del socialismo al estilo coreano.
El documento será distribuido a todas las organizaciones partidistas de distintos niveles como el de circulación interna del Partido.
El Secretario General del PTC pronunció las palabras de clausura
«El 8° Congreso del Partido del Trabajo de Corea que se efectuó en el tiempo muy importante para su fortalecimiento y desarrollo y el trayecto de la construcción del socialismo a nuestro estilo termina su trabajo tras deliberar y decidir con suficiencia todos los problemas puestos sobre el tapete gracias al elevado entusiasmo de todos los delegados.
Todos ustedes asistieron a la discusión de los problemas con sinceridad y máxima conciencia y responsabilidad partidistas, presentaron activamente las opiniones constructivas, concordaron sus criterios, y así, demostraron sin reservas la imagen combativa de nuestro Partido que trabaja, lucha y avanza.
Rindo mi sincero agradecimiento en nombre del presente Congreso a todos los militantes del Partido, otros sectores de la población y los militares quienes mantuvieron la máxima alerta y manifestaron su infinita abnegación y espíritu revolucionario para asegurar la realización exitosa del 8° Congreso del Partido.
Este Congreso fue el de la lucha y el avance que manifestó la invariable voluntad de los revolucionarios de lograr sin falta el progreso y desarrollo del socialismo a nuestro estilo con la confianza en la victoria y el vigor enarbolando con firmeza la bandera del gran kimilsungismo-kimjongilismo.
Esta cita tiene gran importancia también en consolidar y evolucionar nuestro Partido.
Nosotros, que acabamos de experimentar otro gran proceso en la trayectoria del fortalecimiento de nuestro Partido, estamos más que nunca llenos de la autoestima y dignidad sobre nuestra lucha y sentimos una vez más con profundidad la importancia de la responsabilidad que asumimos voluntariamente.
La resolución del Congreso del Partido es la estrategia y táctica de nuestro Partido para conquistar nuevos triunfos en la construcción del socialismo a nuestro estilo, el compromiso que toma el Partido ante la revolución y el pueblo, y al mismo tiempo, la suprema orden que imparte nuestro pueblo al CC del Partido.
Nuestros militantes del Partido y delegados deben tratar la resolución con tal sublime punto de vista y admitirla como algo pesado y honroso.
Nuestro Partido será fiel sin límites a la teoría de dar prioridad a las masas populares en adelante también al igual que en el pasado y dedicará toda su fuerza a conquistar las nuevas victorias sucesivas en la construcción del socialismo.
Exteriorizando la seguridad de que gracias a la alta combatividad, la unidad, la descomunal pasión patriótica y el indomable esfuerzo de las organizaciones y militantes de todo el Partido, todos los sectores de la población y los miembros del Ejército Popular, se materializarán con brillantez la estrategia y orientaciones de lucha trazadas por el Congreso y se obtendrá un avance radical en la construcción del socialismo a nuestro estilo, declaro concluido el 8° Congreso del Partido del Trabajo de Corea.»
Se interpretó solemnemente «La Internacional».
Al finalizar el cónclave, todos los participantes aclamaron al camarada Kim Jong Un, gran líder del digno PTC y destacado dirigente de la revolución del Juche, tomando el juramento de seguirle con fidelidad.
El Máximo Dirigente respondió cordialmente a los delegados quienes compartiendo la responsabilidad asumida ante el Partido, dedicaron toda su alma a la celebración exitosa del Congreso, bien conscientes en todo el curso del mismo de que les cifran gran esperanza millones de militantes del Partido y decenas de millones de habitantes.
Todos los participantes redoblaron la determinación de acatar con todo su corazón y energía la dirección del CC del gran Partido y alcanzar cambios reales y éxitos sustanciales siendo la semilla de revolución, abanderado y vanguardia de avance en todos los sectores por la materialización de resolución del VIII Congreso del Partido.
El VIII Congreso del PTC, efectuado en el período clave e importante para el desarrollo de la revolución coreana, presentó la correcta dirección de avance, que deben tomar en la etapa actual el partido y pueblo coreanos, y las científicas orientaciones estratégicas y tácticas y preparó la fuerza impulsora para su cumplimiento, de modo que se mostraran plenamente el aspecto revolucionario e ímpetu combativo del PTC que va creando e innovando constantemente manteniendo su integridad.
La magna cita se registrará en los anales del Partido y la patria como acontecimiento político, que marcó un hito de ascenso en el trayecto de fortalecimiento del gran Partido Kimilsungista-Kimjongilista y desarrollo general de la causa socialista al estilo coreano, y como cónclave de lucha y avance que dio buen impulso a la marcha histórica para abrir nueva era de auge y cambios de la revolución.
El Máximo Dirigente Kim Jong Un, Secretario General del Partido del Trabajo de Corea, Presidente del Comité de Estado de la República Popular Democrática de Corea y Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas de la RPDC, visitó el día 12 el Palacio del Sol Kumsusan junto con los miembros del recién elegido VIII órgano de dirección central del partido.
Entre sus acompañantes se distinguían Choe Ryong Hae, miembro del Presidium del Buró Político del CC del PTC, primer vicepresidente del Comité de Estado y presidente del Presidium de la Asamblea Popular Suprema de la RPDC; Jo Yong Won, miembro del Presidium del BP y secretario del CC del PTC; Ri Pyong Chol, miembro del Presidium del BP del CC del PTC, vicepresidente de la Comisión Militar Central y secretario del CC del PTC; Kim Tok Hun, miembro del Presidium del BP del CC del PTC y primer ministro de la RPDC.
Los participantes, que asumieron el importante cargo de miembro del órgano de dirección central del Partido en su VIII Congreso de gran relevancia política para el desarrollo del Partido y la revolución, visitaron el lugar sagrado del Juche donde están conservados los cuerpos del Presidente Kim Il Sung y el Dirigente Kim Jong Il, líderes eternos del partido y pueblo coreanos y grandes sabios virtuosos.
Al pie de las estatuas de pie de los grandes Líderes, fue colocado un cesto de flores a nombre del Comité Central del PTC.
El Secretario General Kim Jong Un rindió junto con los acompañantes el homenaje sublime a los líderes antecesores ante sus estatuas de pie y en los salones de eternidad donde están conservados sus cuerpos.
Los integrantes del órgano de dirección central tomaron la firme decisión de cumplir con su importante responsabilidad atribuida por el Partido, la patria y el pueblo considerando la resolución del histórico VIII Congreso del Partido como juramento solemne hecho ante el pueblo y la orden dada por éste para lograr nueva victoria de la revolución bajo la guía del Secretario General del PTC.
ACNC
Salud y gloria al heroico pueblo NORCOREANO ✊
Abrazo gigante desde Montevideo Uruguay.